Algunas de las mejores ideas y desarrollos tecnológicos médicos que podrían darnos una idea del futuro de la medicina.
La medicina y la atención médica están experimentando avances impresionantes con innovaciones como exoesqueletos que pueden leer la mente, lo que abre nuevas posibilidades para la movilidad y la rehabilitación.
También se están desarrollando tatuajes digitales, que podrían ofrecer una forma innovadora de monitorear la salud de manera continua y no invasiva. Además, los medicamentos impresos en 3D están revolucionando la forma en que se producen y administran los tratamientos, permitiendo personalización y eficiencia.
Por otro lado, los implantes RFID con fines recreativos están explorando nuevas dimensiones en la interacción humana y la tecnología. Estos desarrollos no solo son fascinantes, sino que también nos dan una visión del futuro de la medicina, donde la tecnología y la salud se entrelazan de maneras sorprendentes. La cantidad de innovaciones es tan vasta que resulta un desafío reunirlas en un solo artículo, lo que refleja la rapidez con la que avanza este campo.
1) La realidad mixta abre nuevos caminos para la educación médica.
La realidad mixta, junto con la realidad aumentada y virtual, está transformando la educación médica al ofrecer nuevas formas de interacción y aprendizaje. Estas tecnologías permiten a los profesionales de la salud visualizar y manipular información digital en contextos reales, lo que puede mejorar significativamente la formación y la práctica médica.
La realidad aumentada se utiliza en entornos quirúrgicos, donde los cirujanos pueden acceder a información vital proyectada en su campo de visión, lo que puede ser crucial para la toma de decisiones durante las operaciones. Por otro lado, la realidad virtual se aplica en el tratamiento de fobias en psiquiatría, proporcionando simulaciones que ayudan a los pacientes a enfrentar sus miedos de manera controlada. Un ejemplo destacado es el uso de las HoloLens de Microsoft en la educación médica, que permite a los estudiantes observar el cuerpo humano en tamaño real y en tres dimensiones.
Esto facilita un aprendizaje más inmersivo y efectivo, ya que los estudiantes pueden estudiar la anatomía de manera más detallada y memorable que con métodos tradicionales. Varias instituciones académicas, como Case Western y la Facultad de Medicina de la Universidad de Nueva York, ya han integrado estas tecnologías en sus programas educativos, lo que demuestra un avance significativo en la forma en que se enseña y se aprende en el ámbito de la salud.
2) Las interfaces cerebro-computadora brindan esperanza a los paralizados
Las interfaces cerebro-computadora (BCI) están emergiendo como una solución prometedora para las personas con parálisis. Investigadores como el Dr. Gary Marcus y el Dr. Christof Koch han comparado el estado actual de los implantes cerebrales con los inicios de la cirugía ocular con láser, anticipando un avance significativo en los próximos años.
En 2024, se han realizado ensayos de BCI, destacando el trabajo de empresas como Synchron, que ha desarrollado un dispositivo llamado «stentrode», implantado de manera mínimamente invasiva a través de la vena yugular. Este procedimiento ha sido probado en diez pacientes, y la empresa busca la aprobación de la FDA para un ensayo más amplio.
Por otro lado, Neuralink, aunque ha recibido más atención mediática, presenta resultados menos claros en comparación con Synchron. El primer paciente de Neuralink ha mostrado estabilidad en su implante, y la compañía planea realizar un segundo procedimiento. La combinación de BCI con exoesqueletos ha demostrado ser efectiva, como se evidenció en el caso de un hombre paralítico que pudo mover sus extremidades gracias a esta tecnología.
El futuro de las BCI es prometedor, con la posibilidad de desarrollar chips que mejoren la visión y la audición, así como implantes que amplíen la memoria. Además, ya existen neuroprótesis en el mercado, como implantes cocleares y dispositivos de estimulación cerebral profunda, que están mejorando la calidad de vida de muchas personas. La investigación en este campo continúa, abriendo la puerta a innovaciones que podrían transformar la interacción humana con la tecnología.
3) ¿Podríamos todos terminar siendo cyborgs recreativos?
Existen ejemplos notables de cíborgs en la vida real, lo que sugiere que estas entidades no solo serán parte del ámbito de la ciencia ficción, sino que también se integrarán en nuestra vida cotidiana en un futuro cercano. Se anticipa que una nueva generación, influenciada por tendencias culturales, comenzará a implantar dispositivos tecnológicos en sus cuerpos con el fin de mejorar su estética y estatus social.
Los avances en tecnología médica no solo se centrarán en la reparación de discapacidades físicas, como la pérdida de visión, sino que también permitirán el desarrollo de habilidades sobrehumanas. Ejemplos de esto incluyen dispositivos como audífonos con inteligencia artificial y auriculares que facilitan la comunicación en múltiples idiomas. Además, se prevé que la implantación de dispositivos tecnológicos se extienda más allá de la necesidad médica, con pacientes que opten por mejoras tecnológicas sin presentar problemas de salud.
4) Impresión 3D de medicamentos con forma de dinosaurios para niños.
La impresión 3D ha avanzado en diversas áreas, incluyendo la fabricación de medicamentos. En 2015, la FDA aprobó Spritam, un medicamento para la epilepsia, que se produce mediante impresión 3D, permitiendo una disolución más rápida que las pastillas convencionales. Investigadores del University College de Londres están explorando formas creativas de medicamentos impresos, como tabletas en forma de dinosaurios o pulpos, para facilitar su ingesta en niños. FabRx, fundada por los profesores Abdul Basit y Simon Gaisford, busca comercializar tabletas impresas en un plazo de 5 a 10 años.
Aunque el progreso ha sido más lento de lo esperado, hay medicamentos aprobados y ensayos clínicos en curso. Actualmente, FabRx está llevando a cabo el primer ensayo clínico pediátrico en Europa para evaluar la eficacia de los medicamentos impresos en 3D.
El potencial de esta tecnología es significativo, ya que podría permitir la creación de píldoras personalizadas que se adapten a las necesidades individuales de los pacientes, mejorando así la adherencia y eficacia del tratamiento. Esto podría transformar el panorama farmacéutico al ofrecer dosis precisas y formas más accesibles de medicación.
5) La gamificación en seguros de salud no es un juego.
En noviembre de 2017, Qualcomm y United Healthcare integraron los dispositivos wearables de Samsung y Garmin en su programa de bienestar, permitiendo a los participantes ganar más de 1000 dólares al año al cumplir con objetivos de caminata diaria. Este desarrollo sugiere un inicio de colaboración entre compañías de seguros de salud y fabricantes de wearables, impulsando la gamificación como una forma de motivar a las personas hacia un estilo de vida más saludable. Un ejemplo destacado es la aplicación MySugr, diseñada para el control de la diabetes. Esta aplicación utiliza un enfoque lúdico, donde los usuarios pueden «domesticar» monstruos, simbolizando el desafío de manejar la diabetes.
La idea surgió de la experiencia personal de uno de los fundadores, quien implementó un sistema de puntos de recompensa para mejorar su autocontrol, lo que llevó a que millones de personas usen la aplicación. Sin embargo, surgen preguntas sobre el papel de las compañías de seguros en la promoción de estas soluciones gamificadas.
Existen preocupaciones sobre el uso de datos de actividad física para ajustar primas de seguros y la privacidad de la información de los pacientes. Además, se plantea cómo cambiará la relación entre empleadores, empleados y aseguradoras a medida que se facilite el acceso a datos personales de salud. Estas cuestiones éticas son cruciales y requieren respuestas equilibradas a medida que se expanden las opciones de seguimiento gamificado en los seguros de salud.
6) ¿Las nuevas tecnologías traen consigo nuevas enfermedades?
En el desarrollo tecnológico, surgen riesgos de enfermedades desconocidas relacionadas con el uso excesivo de dispositivos como la realidad virtual, videoconsolas y teléfonos inteligentes. Un ejemplo es el trastorno de estrés postraumático virtual (TEPT-v), que afecta a jugadores inmersos en batallas virtuales, presentando síntomas similares a los de veteranos de guerra.
La epilepsia por videojuegos es otro problema documentado, donde los videojuegos pueden provocar convulsiones en personas con epilepsia fotosensible más que los programas de televisión… También se han reportado lesiones relacionadas con la consola Wii, que promueve un estilo de juego más físico. Además, el «cuello de texto» describe el dolor en el cuello causado por mirar hacia abajo en dispositivos móviles durante períodos prolongados. Se anticipa que estas nuevas afecciones recibirán códigos ICD pronto.
7) Los alimentos artificiales como esperanza ante la escasez de alimentos.
La alimentación del futuro está siendo transformada por innovaciones como el té sintético, la carne cultivada en laboratorio y la leche artificial. Estas soluciones buscan reducir la sobreexplotación de recursos naturales y alimentar a una población creciente. Mosa Meat, una empresa de los Países Bajos, presentó su primera hamburguesa en 2013 y ahora busca aprobación para su venta en Singapur, aunque su desarrollo ha tomado más tiempo del esperado.
Además, Hoxton Farms está trabajando en una alternativa cultivada a la grasa de cerdo, utilizando células madre en biorreactores. Otras empresas como Cell4Food y Onego Bio están desarrollando productos que sustituyen ingredientes tradicionales, como el pulpo y la ovoalbúmina, respectivamente.
Perfect Day, por su parte, produce suero a través de fermentación de precisión. Finalmente, Standing Ovation se enfoca en crear alternativas de queso a partir de caseínas, utilizando también fermentación de precisión, lo que podría representar un cambio significativo para la comunidad vegana. Estas innovaciones reflejan un futuro donde la alimentación puede desvincularse de métodos tradicionales y ser más sostenible.
8) La voz como herramienta de diagnóstico y apoyo médico.
En los últimos años, se ha observado el potencial de las soluciones basadas en voz en el ámbito de la atención sanitaria, tanto para el diagnóstico como para la administración de tareas diarias. Los biomarcadores vocales, que son características de las voces de los pacientes, pueden proporcionar información valiosa sobre su salud y ayudar en la detección de enfermedades graves.
Un ejemplo destacado es el trabajo de Vocalis Health con la Mayo Clinic, donde desarrollaron herramientas para identificar biomarcadores vocales relacionados con la hipertensión pulmonar. Sin embargo, la empresa ha cerrado sus operaciones. Por otro lado, Sonde Health Inc. está trabajando en una plataforma tecnológica que utiliza la voz para monitorear y diagnosticar condiciones médicas, tanto mentales como físicas, y se espera que surjan más soluciones en este campo.
El análisis de la tos es un área de interés particular. Con el uso de hardware especializado y software de inteligencia artificial, se pueden obtener detalles sobre los hábitos de tos de una persona, lo que es útil tanto para la autoevaluación como para evaluaciones clínicas. Aplicaciones como CoughTracker y CoughPro ya están disponibles, permitiendo a los usuarios identificar y registrar sus toses, mientras que otras empresas como Swasaa y Raisonance están desarrollando aplicaciones similares.
9) Empoderamiento del paciente y diseño del paciente.
En la última década, la salud digital ha transformado la medicina, promoviendo una relación más equitativa entre médicos y pacientes. Este cambio cultural se basa en el uso de tecnologías médicas que ofrecen datos accesibles, lo que permite una toma de decisiones compartida y democratiza la atención médica.
El enfoque en la atención centrada en el paciente está evolucionando hacia un diseño que incluye a los pacientes como parte del equipo. Esto significa que la atención médica se desarrolla con la participación activa de los pacientes, en lugar de ser diseñada solo para ellos.
Los pacientes están adoptando el rol de «e-pacientes», donde «e» representa aspectos como electrónico, empoderado y comprometido. Estos pacientes asumen la responsabilidad de su salud y colaboran con sus cuidadores, apoyados por dispositivos portátiles y sensores de salud. Esta evolución no solo es tecnológica, sino que también redefine la relación entre pacientes y profesionales de la salud.
10) Tatuajes digitales para una sanidad más invisible.
El desarrollo de la impresión 3D y las tecnologías de impresión de circuitos han permitido la creación de tatuajes digitales o electrónicos, que se pueden aplicar sobre la piel por varios días o incluso semanas.
Estos tatuajes utilizan materiales como nanobarras de oro, grafeno y polímeros con soporte de goma, garantizando la comodidad y minimizando la irritación cutánea. Se anticipa que estos parches son solo el inicio de una evolución en técnicas cutáneas que incluirán métodos como la henna, el bronceado y el maquillaje.
La tecnología presente en estos tatuajes permite registrar y transmitir información sobre el usuario a dispositivos inteligentes, facilitando el monitoreo de importantes condiciones de salud.
Su capacidad para informar sobre arritmias cardíacas, monitorear la salud de bebés prematuros y evaluar trastornos del sueño muestra su potencial en el ámbito médico. Además, el diseño flexible y resistente de estos dispositivos, que no requiere carga continua, es ideal para el seguimiento constante de pacientes de alto riesgo.
Aunque todavía está en desarrollo, productos como el sensor BioStampRC de MC10 representan una aproximación interesante a esta tecnología, a pesar de su desaparición del mercado.